La Neuralgia Trigeminal se describe como uno de los dolores más fuertes conocidos por el hombre. Es un desorden del nervio trigémino que produce repentinos e insoportables latigazos de dolor facial. Este dolor, se produce típicamente donde el nervio se ramifica a la nariz, labios, ojos, oídos, cuero cabelludo, frente, mandíbula superior e inferior e incluso a la lengua.
La Neuralgia Trigeminal normalmente afecta a un sólo lado de la cara y, con el tiempo, el dolor suele aumentar en intensidad y frecuencia. Éste es tan intenso que, a menudo, nos referimos a él como la “enfermedad suicidio”.
El renombrado autor y seguidor de las técnicas quiroprácticas de la parte superior cervical, Pastor James Tomasi, conoce la agonía de primera mano, ya que luchó contra el dolor de NT durante 12 años. En su libro “What Time Tuesday?”, Tomasi detalla su lucha contra la Neuralgia Trigeminal.
“… el dolor comenzó como una serie de descargas que progresivamente se convertían en puñaladas constantes. A veces era como un taladro que atravesaba mis muelas en la mandíbula derecha. Entonces, de repente se paraba. Algunas cosas acentuaban el dolor: una ligera brisa, el toque de un cepillo de dientes, enjabonarme el carrillo, abrir la boca, hablar, girar la cabeza rápidamente, etc., y más tarde, la bestia volvía como una venganza. Otras veces, me despertaba con la sensación de tener el taladro enviando descargas eléctricas a la parte posterior de mi ojo. Era tan insoportable que gritaba en voz alta mientras sujetaba una almohada contra mi cara…”
Gracias a Dios, mi mujer escuchó en la radio acerca de la quiropráctica. Durante los once días que siguieron a mi primer ajuste cervical ¡no tuve dolor!
Tratamiento médico para la Neuralgia Trigeminal y el dolor facial asociado
El tratamiento médico más común incluye medicamentos o cirugía. Algunos medicamentos utilizados habitualmente para tratar este trastorno son los medicamentos antiepilépticos como el Neurontín. En los últimos años, se han utilizado medicamentos como Trileptal, Topamax, Depakote e incluso antidepresivos. Sin embargo, con el tiempo, la efectividad de los fármacos puede disminuir o se pueden desarrollar efectos secundarios graves.
Como último recurso, muchos pacientes con Neuralgia Trigeminal consideran la cirugía como la alternativa para terminar con su sufrimiento.
La clínica Mayo menciona que el propósito de las cirugías es dañar o destruir parte del nervio trigémino que está causando el dolor. Ya que el éxito de estos procedimientos depende del daño del nervio, uno de los efectos secundarios es el adormecimiento facial.
Algunos de los procedimientos quirúrgicos más habituales envuelven:
- Rizotomía de Radiofrecuencia
- Rizotomía de glicerol
- Compresión de globo
- Descompresión micro vascular
- Cuchillo Gamma
Desafortunadamente, un informe reciente revela que el tratamiento médico falla en casi un 50% de los pacientes con Neuralgia Trigeminal.
Cuidado quiropráctico cervical y la Neuralgia Trigeminal
Estudios han revelado que la Neuralgia Trigeminal comienza con una irritación o daño al nervio trigémino y al núcleo central del trigémino en la parte superior de la médula y el tallo cerebral.
La literatura médica ha dado a conocer que, un trauma en la cabeza, el cuello o la parte superior de la espalda puede dañar la zona por donde pasa el nervio en la médula espinal y el tallo cerebral y puede causar Neuralgia Trigeminal. El dolor facial puede comenzar inmediatamente después de la lesión o, en algunos casos, tardar meses o años en desarrollarse. Un estudio piloto reciente, conducido por el centro de investigación Sid E. Williams en la Universidad Life, ofrece resultados sorprendentes en pacientes con Neuralgia Trigeminal. Los participantes recibieron cuidado quiropráctico cervical durante ocho semanas. Todos los participantes experimentaron un importante alivio del dolor durante las primeras cuatro semanas para después continuar mejorando gradualmente. El director de la investigación, el Sr. Roger Hinson, sugiere que cuando se desarrolla la Neuralgia Trigeminal, esta puede ser la causa de que un mal alineamiento de la columna en la parte superior del cuello haya contribuido al estado de hiperactividad del nervio, causando de este modo dolor facial intenso asociado a la Neuralgia Trigeminal.
Juan Alonso tiene la práctica y la experiencia para localizar y corregir lesiones en la parte superior del cuello. Corrigiendo estas lesiones, se reduce la irritación de los nervios en el tallo cerebral que pueden causar Neuralgia Trigeminal. En cada caso, es necesario un examen quiropráctico para determinar la existencia de lesión en la parte superior cervical, y saber si se pueden lograr beneficios con el cuidado. Si usted, o alguien a quien conoce, sufre de Neuralgia Trigeminal y le gustaría recibir la ayuda específica de un quiropráctico, no dude en llamarnos para un chequeo espinal.